Un intercooler (o enfriador de aire) es un intercambiador de calor que se emplea en motores de combustión interna con turbo. En un motor turbo, el aire es aspirado y enviado a presión al colector de entrada. Debido a la presión entra más aire y, por lo tanto oxígeno, a la cámara de combustión, por lo que se puede inyectar más combustible. Esto permite que el motor genere más potencia y se produzca una mejor combustión.

Sin embargo, la compresión del aire tiene una desventaja: la temperatura del aire asciende. Esto hace que cambie la densidad del aire y provoca una combustión menos completa. Al enfriar el aire aspirado, este se contrae, permitiendo que se bombee una mayor masa de aire a la cámara de combustión.